[#11]: Narraciones (Journaling) en tus Scrapbooks: Una Introducción

© 2012 Zaira Ivette Sierra

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Nota de Zaira Ivette: Este artículo se publicó originalmente como un artículo invitado en el blog Scrapwit en febrero de 2012. Esta en una versión mínimamente revisada de aquella original.

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Si recién comienzas a seguirme, probablemente te sorprenda saber que mi parte favorita de la creación de álbumes es la narración (journaling). La mayoría de los creadores de álbumes se sienten intimidados por este aspecto, pero para mí es el que más disfruto en todo el proceso. Darle vida a las fotos a través de las palabras me parece hermoso. Permíteme introducirte de manera sencilla a esta parte del proceso.

La Mascota Accidental | Zaira Ivette Sierra
Despliegue de doble plana rectangular (8½" x 11").

→ ¿Qué es la narración?

La narración en tu álbum, es precisamente eso: un recuento de lo que las fotos o los objetos de recuerdos que estás exhibiendo tratan de contar. No hay una sola manera de narrar estas anécdotas. El estilo, lenguaje y extensión de tu narración son particulares a tu personalidad, necesidad... y a la historia misma.

→ ¿Qué papel juega la narración en mi álbum?

Velo de esta manera: las fotos son el corazón de tu álbum... y la narración es el alma de tu álbum. La verdadera diferencia entre un álbum regular y uno tipo "scrapbook" no es tanto el aspecto artístico y decorativo. La verdadera diferencia entre los dos tipos de álbumes es la manera diferente de presentar la misma historia. Uno de esos elementos que hace la diferencia es la capacidad de contar la historia con palabras además de imágenes.

→ Pero... ¿y no que una foto "vale más que mil palabras"?

¡Oh, muy cierto! Una foto sí que vale más que mil palabras. Lamentablemente, la foto no puede expresar esas mil palabras por sí misma. En este caso, tu narración va a darle voz a esa foto. Tu narración va a darle vida a esa foto. Tus palabras van a aumentar el valor de esa foto.

→ Entonces, ¿tengo que redactar la narración en mis álbumes?

Bueno, la verdad es que "tener"... no "tienes". Esto es particularmente cierto si el propósito principal de tu actividad como creadora de álbumes es la expresión artística. Por otro lado, si el propósito principal de tus álbumes es crear un documento que cuente tu historia y que pase a la siguiente generación, entonces es una sabia decisión incluir algún tipo de narración en el mismo.

→ Pero yo no soy escritor(a)...

¡Oh, no te preocupes por eso! El tipo de narración que vas a incluir en tus álbumes no requiere que seas capaz de escribir una nueva secuela para "El Quijote", ni un reportaje investigativo para "National Geographic". El tipo de narración requerida en tus álbumes es una mucho más natural y coloquial. Básicamente vas a escribir lo que le dirías a alguien si le estuvieras enseñando la foto. Quizás le expliques lo que esta justo frente a sus ojos. Además le podrías añadir algo interesante relacionado con la historia que cuentan las fotos, pero que no está documentado en las mismas.

Por ejemplo, tienes una foto de la deliciosa cena navideña, y además explicas que fue preparada por ti tía Evangelina usando el ingrediente secreto que nunca ha revelado a nadie. Y entonces la foto de la cena se vuelve mucho más valiosa, porque comparte, con la narración, ese secreto de familia.

Por eso mismo, en este tipo de narración vas a usar tus palabras y tus emociones. Es tu historia la que estás contando, así que es importante que se sienta que viene de ti. Si tienes el talento de redactar de manera fabulosa, ¡por supuesto que lo puedes utilizar! Pero si ese no es tu fuerte, contar esas anécdotas en tu propio estilo, con tus propias palabras, es efectivo y valioso.

→ ¿Y todo eso para qué?

Todo eso, probablemente para esto:

¿Haz visto en las tiendas las biografías de las celebridades? Todos ellos, del espectáculo, los deportes, la política, las finanzas y la realeza, han contado su vida. Algunos han escrito su propia historia; otros han sido estudiados por terceros que han publicado dichos libros. ¡Algunos incluso tienen biógrafos oficiales!

Y tu historia, ¿quién la cuenta? Yo, en lo particular, no tengo un biógrafo oficial. O mejor expresado, yo soy mi biógrafa oficial. Yo cuento mi historia. Y te invito a hacer lo mismo. Tu álbum es tu libro, sobre ti y las cosas que son importantes para ti. Tú lo escribes, lo diseñas, lo editas y lo publicas. Y haces una edición limitada (por lo general es una sola copia), y lo pones a disposición de tu público. ¿Por qué no contar tu historia con tus propias palabras? ¿Por qué no documentar quién eres, sin intermediarios?

Esta es mi invitación para ti, y me encantaría guiarte por este fascinante proceso.


Ahora, cuéntame tú:

→ ¿Es la narración una parte placentera o aterrorizante en tu creación de álbumes?
→ ¿Crees que la narración, esn términos generales, es necesaria u opcional en la creación de álbumes?
→ ¿Es la narración una destreza que te gustaría desarrollar, o no te interesa tanto?